Nuestros Valores
Juventud Con Una Misión (JUCUM) afirma la Biblia como la palabra fidedigna de Dios y, junto a la inspiración del Espíritu Santo, como punto de referencia absoluto para cada aspecto de la vida y el ministerio. Basados en la Palabra de Dios, en quien Él es, y su iniciativa de salvación, las siguientes respuestas son fuertemente enfatizadas en JUCUM:
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Alabanza – Somos llamados a alabar y adorar solo a Dios.
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Santidad – Somos llamados a vivir nuestras vidas en justicia y santidad que ejemplifiquen la naturaleza y carácter de Dios.
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Testificación – Somos llamados a compartir el evangelio de Jesucristo con aquellos que no conocen de Él.
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Oración – Somos llamados a emplear la oración intercesora para las personas y causas en el corazón de Dios, incluyendo el haberle frente al mal en todas las formas.
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Comunidad – Somos llamados a comprometernos en la iglesia en ambos sentidos, su expresión criadora local y su expresión de multiplicación móvil.
Los 18 Valores Fundamentales de Juventud Con Una Misión (JUCUM) son la expresión de nuestras creencias fundamentales, unidas a directrices específicas dadas por Dios desde el inicio de JUCUM en 1960. Estas creencias y valores que compartimos son la guía principal para el crecimiento tanto pasado como futuro de nuestra Misión. Algunos de éstos son comunes para los cristianos en cualquier lugar; otros son característicos de Juventud Con Una Misión. La combinación de estas creencias y valores conforman las características únicas de la familia de JUCUM – nuestro “ADN”. Estos son valores que mantenemos en alta estima, los cuales a su vez determinan quienes somos, como vivimos y como tomamos decisiones.
1. CONOCER A DIOS
JUCUM está comprometido a conocer a Dios, Su naturaleza, Su carácter y Sus caminos. Buscamos reflejar quién es Él en cada aspecto de nuestras vidas y ministerios. El resultado automático de conocerle y disfrutar la comunión con Dios es el deseo de compartirle a Él con otros.
2. DAR A CONOCER A DIOS
JUCUM está llamado a dar a conocer a Dios a través de todo el mundo y en cada esfera de la sociedad por medio del evangelismo, entrenamiento y ministerios de misericordia. Creemos que la salvación de las almas debe dar como resultado la transformación de las sociedades, obedeciendo de esta manera el mandato de Jesús de hacer discípulos en todas las naciones.
3. ESCUCHAR LA VOZ DE DIOS
JUCUM está comprometido a crear con Dios a través de escucharle, orar y obedecer sus mandamientos tanto en lo pequeño como en lo grande. Dependemos de escuchar Su voz como individuos, juntos en el contexto de equipo y en grandes reuniones corporativas. Esta es una parte integral de nuestro proceso en la toma de decisiones.
4. PRACTICAR LA ADORACIÓN Y LA ORACIÓN INTERCESORA
JUCUM está dedicado a adorar a Jesús e involucrarse en la oración intercesora como aspectos integrales de la vida diaria. También reconocemos la intención de Satanás de destruir la obra de Dios y clamamos por el poder de Dios y de su Espíritu Santo para vencer las estrategias del enemigo en las vidas de los individuos y en los asuntos relacionados con las naciones.
5. SER VISIONARIO
JUCUM está llamado a ser visionario, recibiendo, nutriendo, e impartiendo continuamente una visión fresca de Dios. Apoyamos el nacimiento de nuevos ministerios y métodos. Siempre estamos dispuestos a ser radicales para ser relevantes a cada generación, pueblo y esfera de la sociedad. Creemos que el llamado apostólico de JUCUM requiere la integración del liderazgo espiritual del cuerpo de ancianos, libertad en el Espíritu y relaciones centradas en la Palabra de Dios.
6. ANIMAR Y PROMOVER A LOS JÓVENES
JUCUM está llamado a animar y promover a los jóvenes. Creemos que Dios ha dado dones y un llamado a la gente joven para ser punta de lanza en la visión y el ministerio. Estamos comprometidos a valorarlos, confiar en ellos, capacitarlos, apoyarlos, hacer espacio para ellos y enviarlos. Ellos no sólo son la iglesia del futuro; son la iglesia del presente. Nos comprometemos a seguirlos a donde nos dirijan en la voluntad de Dios.
7. TENER UNA ESTRUCTURA AMPLIA Y DESCENTRALIZADA
JUCUM tiene una estructura amplia y diversa pero aún así integrada. Somos una familia global de ministerios que se mantienen unidos por un propósito, visión, valores y relaciones compartidas. Creemos que las estructuras deben servir a las personas y a los propósitos de Dios. Cada ministerio a todos los niveles tiene el privilegio y la responsabilidad de rendir cuentas a un cuerpo de ancianos, también rindiendo cuentas a nivel internacional al Equipo Global de Liderazgo de JUCUM.
8. SER INTERNACIONAL E INTERDENOMINACIONAL
JUCUM es internacional e interdenominacional en su alcance global así como en su conformación local. Creemos que la diversidad étnica, lingüística y denominacional, junto con los aspectos redimidos de la cultura, son factores positivos que contribuyen a la salud y el crecimiento de la misión.
9. TENER UNA COSMOVISIÓN BÍBLICA
JUCUM está llamado a una cosmovisión bíblica. Creemos que la Biblia hace una clara división entre el bien y el mal. Las dimensiones prácticas de la vida no son menos espirituales que las expresiones del ministerio. Todo lo que se hace en obediencia a Dios es espiritual. Buscamos honrar a Dios con todo lo que hacemos, equipando y movilizando a hombres y mujeres de Dios para que tomen roles de servicio e influencia en cada esfera de la sociedad.
10. FUNCIONAR EN EQUIPOS
JUCUM está llamado a funcionar en equipos en todos los aspectos del ministerio y del liderazgo. Creemos que una combinación complementaria de dones, llamados, perspectivas, ministerios y generaciones trabajando juntos en unidad a todos los niveles de nuestra misión, proveen sabiduría y seguridad. Buscar la voluntad de Dios y tomar decisiones en un contexto de equipo facilita el rendir cuentas y contribuye a una mayor relación, motivación, responsabilidad y sentido de pertenencia de la visión.
11. MOSTRAR UN LIDERAZGO DE SERVICIO
JUCUM está llamado a un liderazgo de servicio como estilo de vida, en lugar de una jerarquía de liderazgo. Un líder siervo es aquel que honra los dones y llamados de aquellos quienes están bajo su cuidado y guarda sus derechos y privilegios. Así como Jesús sirvió a sus discípulos, enfatizamos la importancia de que aquellos que están en posiciones de liderazgo sirvan a aquellos a quienes dirigen.
12. PRIMERO HACER Y LUEGO ENSEÑAR
JUCUM está comprometido a primero hacer y después enseñar. Creemos que la experiencia de primera mano da autoridad a nuestras palabras. Un carácter piadoso y un llamado de Dios son más importantes que los dones, habilidades y destrezas de un individuo.
13. ESTAR ORIENTADO A LAS RELACIONES
JUCUM está dedicado y orientado hacia las relaciones interpersonales en nuestra vida diaria y nuestro trabajo en conjunto. Deseamos estar unidos a través de vidas de santidad, apoyo mutuo, transparencia, humildad y una comunicación abierta, en lugar de una dependencia de estructuras o reglas.
14. VALORAR AL INDIVIDUO
JUCUM está llamado a valorar a cada individuo. Creemos en la equidad de oportunidades y justicia para todos. Creados a la imagen de Dios, las personas de todas las nacionalidades, edades y funciones tienen contribuciones y llamados distintivos. Estamos comprometidos a honrar el liderazgo y los dones ministeriales dados por Dios tanto a hombres como a mujeres.
15. VALORAR A LAS FAMILIAS
JUCUM afirma la importancia de las familias juntas sirviendo a Dios en las misiones, no sólo el padre y/o la madre. Animamos el desarrollo de la unidad familiar fuerte y saludable, con cada miembro de la familia compartiendo el llamado a las misiones y contribuyendo con sus dones de manera única y complementaria.
16. DEPENDER DEL APOYO ECONÓMICO FUNDAMENTADO EN LAS RELACIONES
JUCUM está llamado a un sistema de apoyo financiero fundamentado en las relaciones, dependiendo de Dios y de su pueblo para la provisión financiera, tanto a nivel grupal como individual. Creemos que el apoyo fundamentado en las relaciones promueve la responsabilidad, el rendir cuentas, la comunicación y la oración mutua. Este sistema involucra al donador como un compañero en el ministerio. Así como Dios y otros han sido generosos con nosotros, de igual forma deseamos ser generosos. Los JUCUMeros dan sus propias vidas, su tiempo y sus talentos a Dios por medio de la misión sin ninguna expectativa de remuneración.
17. PRACTICAR LA HOSPITALIDAD
JUCUM afirma el ministerio de la hospitalidad como una expresión del carácter de Dios y del valor de las personas. Creemos que es importante abrir nuestros corazones, casas, bases y centros para servir y honrar el uno al otro, a nuestros huéspedes y al pobre y necesitado, no como actos de un protocolo social, sino como expresiones de generosidad.
18. COMUNICAR CON INTEGRIDAD
JUCUM afirma que todo existe porque Dios comunica. Por lo tanto, JUCUM está comprometido a la comunicación veraz, precisa, actual y relevante. Creemos que una buena comunicación es esencial para las relaciones sólidas, familias saludables, comunidades y ministerios efectivos.